BLOGS DEL V CONGRESO DE METAPOESIA MADRID 2010 DEDICADO AL POETA ESPAÑOL GUILLERMO CARNERO. ESTE EVENTO SE CELEBRARA LOS DIAS 22, 23 Y 24 DE OCTUBRE. INFORMACION: DANIEL TEJADA (cordinador general en Madrid) vcongresometapoesiamadrid2010@yahoo.com Telf. 625551265 Jorge Piña: nformación en New York: (646) 410-0904 E-Mail: Metapoesia@aol.com
martes, 28 de septiembre de 2010
miércoles, 1 de septiembre de 2010
Del Mito a la Metapoesía
José Enrique Méndez
Aunque existen diversas perspectivas y puntos de vista alrededor de los mitos y su definición, en el presente trabajo lo consideraremos como aquellos relatos fundadores que los miembros de una sociedad se transmiten de generación en generación desde los tiempos más antiguos [1]. Sobre la noción que nos ocupa, Arrom dice:
“Los mitos suelen ser compendios de las experiencias de un pueblo, fuente de sus mejores obras de arte y origen de sus creencias más profundas y significativas”.
Como podemos ver, regularmente el origen de un mito puede encontrarse en un acontecimiento histórico ocurrido en un pasado ignoto. El suceso se conserva en la tradición oral, y poco a poco, con el correr del tiempo se va llenado de fantasía. Cabe señalar que no es solamente cualquier clase de historia, al decir griego, sino también la creación de dioses, semidioses, sus hazañas y hasta la factura de una cosmogonía dubitable o no [2].
Al respecto, José Echeverría ha dicho:
“El mito ha de expresar en forma sucesiva y anecdótica lo que es supratemporal y permanente, lo que jamás deja de ocurrir y que, como paradigma, vale para todos los tiempos”[3]
La poesía desde sus orígenes ha dado expresión al mito. La poesía dramática durante largo tiempo fue sólo la representación del mito en forma de acción directa. En ella la acción se desarrollaba mediante diálogos. Cuando el poema estaba consagrado a un hecho solemne e incluía un final trágico, la obra pertenecía a la tragedia. Por su parte, la poesía épica representó el mito en forma de narración. En su Historia de la Estética, Bayer destaca que “entre los poetas épicos, la naturaleza era algo muerto, objetivo, sin duda, animado por dioses y diosas”[4]; y aun “para la lírica, los paisajes eran estados de ánimo; la naturaleza se espiritualizaba y humanizaba”[5], más individual en su expresión, le prestó al mito su voz musical.
Hurgando en el pasado, hoy es posible una recreación demiúrgica poética-literaria a partir de los mitos, estableciendo paralelismo con las leyendas de las fuentes originales, conservando en lo posible la mayor fidelidad en la sintaxis, imprimiéndoles una coherencia poética por medio de la re narración enriquecida, pero rellenando el texto con hermosas imágenes desde las zonas obscuras y abismales del inconsciente: ejes recónditos invisibles de la metapoesia, espacio donde el poema se deja poseer por el ámbito maravilloso del sueño surrealista y el metalenguaje.
Abraham Méndez Vargas, al referirse a mi trabajo metapoético, apunta las siguientes ideas, que son, a mi juicio, igualmente válidas al quehacer propiamente de la Metapoesía en su entrecruce con el mito:
"... la metapoesía tiene la magia de introducirnos de soslayo en la historia del mundo, a partir de ejemplos sencillos, como ‘percepción de simples realidades’ que son como el meollo que sirven de conducto, en su decir original y sin valerse de la retórica clásica, la cual conoce sobremanera, por donde las ‘cosas todas’ que acaecen, ‘presentes sucesivas’, pues la realidad nunca cesa, como el tiempo es sucesivo, y entonces va ‘decursando siempre hacia refugios de desolaciones’, porque la humanidad parece retroceder cuando ha alcanzado cierto grado de civilización, y es por eso que el poeta vuelve al pasado, detrás de esas ‘simples realidades”.
La metapoesia puede dar ilación y continuidad, formas al simbolismo del mito re- narrado, respetando la atmósfera de los originales
En este nuevo campo de la metapoesía- mito, entra en juego la pulsión vital de la descomposición y recomposición, muerte inevitable, y el reconocimiento de la memoria como recuperación del todo, de la identidad; es como soñar despierto la idea de aquellos lejanos saberes primigenios, reconstruyendo el ámbito de lo maravilloso, mediante una asociación de palabras, recuperadas desde todas las manifestaciones del sueño inconsciente.
Abraham Méndez Vargas descubre la neuroplasticidad positiva, la coherencia simbólica, la inserción del elemento meta-onírico en nuestro trabajo metapoético y una vez más al hacer referencia a nuestra creación metapoética, expresa:
“…. es el alma de Dios que habita en los tiempos remotos que nos cobijan los sueños, porque siente que desde el fondo de la tierra sangre aborigen exige no sólo la justicia de la flor de níspero disperso de su agonía crística, sino que también sus ritos y tongoneos de fieros acadios quieren decirnos el color de sus sueños de flor de culo de bruja azul celeste[6].
En este proceso de Mito – Metapoesía, la memoria es poética. Ella crea o fabrica la imagen de su propio devenir, el proceso es creativo y el metalenguaje asume el papel discursivo mediante su voz propia, entonces ocurre, en este sentido, poesía antropológica o antropología poética. La metapoesia, conocedora de la antropología, crea literatura. A partir de la poesía podemos recrear descripciones etnográficas.
[1] Pierre Bonte y Michael Izard. Diccionario Akal de etnología y antropología. p.495
[2] Pag7 Mitología Cubana, Samuel Feijáo
[3] Canto al canto, Cemí, Leyendas y Mitos, Sadi Orsini Luiggi, pag. 12
[4] Historia de la Estetica , Raymond Bayer, Pag.27
[5] Ibidem
[6] Neuroplasticida, Abraham Méndez Vargas, http://identidadsanjuanera.blogspot.com/2009/08/neuroplasticida.html
Aunque existen diversas perspectivas y puntos de vista alrededor de los mitos y su definición, en el presente trabajo lo consideraremos como aquellos relatos fundadores que los miembros de una sociedad se transmiten de generación en generación desde los tiempos más antiguos [1]. Sobre la noción que nos ocupa, Arrom dice:
“Los mitos suelen ser compendios de las experiencias de un pueblo, fuente de sus mejores obras de arte y origen de sus creencias más profundas y significativas”.
Como podemos ver, regularmente el origen de un mito puede encontrarse en un acontecimiento histórico ocurrido en un pasado ignoto. El suceso se conserva en la tradición oral, y poco a poco, con el correr del tiempo se va llenado de fantasía. Cabe señalar que no es solamente cualquier clase de historia, al decir griego, sino también la creación de dioses, semidioses, sus hazañas y hasta la factura de una cosmogonía dubitable o no [2].
Al respecto, José Echeverría ha dicho:
“El mito ha de expresar en forma sucesiva y anecdótica lo que es supratemporal y permanente, lo que jamás deja de ocurrir y que, como paradigma, vale para todos los tiempos”[3]
La poesía desde sus orígenes ha dado expresión al mito. La poesía dramática durante largo tiempo fue sólo la representación del mito en forma de acción directa. En ella la acción se desarrollaba mediante diálogos. Cuando el poema estaba consagrado a un hecho solemne e incluía un final trágico, la obra pertenecía a la tragedia. Por su parte, la poesía épica representó el mito en forma de narración. En su Historia de la Estética, Bayer destaca que “entre los poetas épicos, la naturaleza era algo muerto, objetivo, sin duda, animado por dioses y diosas”[4]; y aun “para la lírica, los paisajes eran estados de ánimo; la naturaleza se espiritualizaba y humanizaba”[5], más individual en su expresión, le prestó al mito su voz musical.
Hurgando en el pasado, hoy es posible una recreación demiúrgica poética-literaria a partir de los mitos, estableciendo paralelismo con las leyendas de las fuentes originales, conservando en lo posible la mayor fidelidad en la sintaxis, imprimiéndoles una coherencia poética por medio de la re narración enriquecida, pero rellenando el texto con hermosas imágenes desde las zonas obscuras y abismales del inconsciente: ejes recónditos invisibles de la metapoesia, espacio donde el poema se deja poseer por el ámbito maravilloso del sueño surrealista y el metalenguaje.
Abraham Méndez Vargas, al referirse a mi trabajo metapoético, apunta las siguientes ideas, que son, a mi juicio, igualmente válidas al quehacer propiamente de la Metapoesía en su entrecruce con el mito:
"... la metapoesía tiene la magia de introducirnos de soslayo en la historia del mundo, a partir de ejemplos sencillos, como ‘percepción de simples realidades’ que son como el meollo que sirven de conducto, en su decir original y sin valerse de la retórica clásica, la cual conoce sobremanera, por donde las ‘cosas todas’ que acaecen, ‘presentes sucesivas’, pues la realidad nunca cesa, como el tiempo es sucesivo, y entonces va ‘decursando siempre hacia refugios de desolaciones’, porque la humanidad parece retroceder cuando ha alcanzado cierto grado de civilización, y es por eso que el poeta vuelve al pasado, detrás de esas ‘simples realidades”.
La metapoesia puede dar ilación y continuidad, formas al simbolismo del mito re- narrado, respetando la atmósfera de los originales
En este nuevo campo de la metapoesía- mito, entra en juego la pulsión vital de la descomposición y recomposición, muerte inevitable, y el reconocimiento de la memoria como recuperación del todo, de la identidad; es como soñar despierto la idea de aquellos lejanos saberes primigenios, reconstruyendo el ámbito de lo maravilloso, mediante una asociación de palabras, recuperadas desde todas las manifestaciones del sueño inconsciente.
Abraham Méndez Vargas descubre la neuroplasticidad positiva, la coherencia simbólica, la inserción del elemento meta-onírico en nuestro trabajo metapoético y una vez más al hacer referencia a nuestra creación metapoética, expresa:
“…. es el alma de Dios que habita en los tiempos remotos que nos cobijan los sueños, porque siente que desde el fondo de la tierra sangre aborigen exige no sólo la justicia de la flor de níspero disperso de su agonía crística, sino que también sus ritos y tongoneos de fieros acadios quieren decirnos el color de sus sueños de flor de culo de bruja azul celeste[6].
En este proceso de Mito – Metapoesía, la memoria es poética. Ella crea o fabrica la imagen de su propio devenir, el proceso es creativo y el metalenguaje asume el papel discursivo mediante su voz propia, entonces ocurre, en este sentido, poesía antropológica o antropología poética. La metapoesia, conocedora de la antropología, crea literatura. A partir de la poesía podemos recrear descripciones etnográficas.
[1] Pierre Bonte y Michael Izard. Diccionario Akal de etnología y antropología. p.495
[2] Pag7 Mitología Cubana, Samuel Feijáo
[3] Canto al canto, Cemí, Leyendas y Mitos, Sadi Orsini Luiggi, pag. 12
[4] Historia de la Estetica , Raymond Bayer, Pag.27
[5] Ibidem
[6] Neuroplasticida, Abraham Méndez Vargas, http://identidadsanjuanera.blogspot.com/2009/08/neuroplasticida.html
José Enrique Méndez
Nació en San Juan de la Maguana, República Dominicana. Poeta, narrador e investigador. Activo gestor de proyectos culturales vinculados con su provincia de origen.
Nació en San Juan de la Maguana, República Dominicana. Poeta, narrador e investigador. Activo gestor de proyectos culturales vinculados con su provincia de origen.
jueves, 26 de agosto de 2010
lunes, 23 de agosto de 2010
POEMAS DE BERNARDO SILFA BOR
OSCILACIÓN DEL SUEÑO
1
Hoy que despierto en el abismo frío
de un instante apagado
hoy que despierto tras el ritmo húmedo
con los átomos inconclusos
me siento lejos de todo lo sólido
hoy he despertado en su trayecto después del tiempo
viendo el signo discordante del tedio
y demandadas las manos
mientras me voy alejando de todo lo líquido
hoy iré despertando perpendicular a ustedes
y después se asociarán al río
los vértices fundidos en mis ojos
alejándome de todo lo inerte
2
soy todo olvido
transfusión de poros hecha a la ausencia
otro estado de carne
negado a tu espacio apocalíptico
otro estado de hueso
moldeando rutas hacia sí mismo
soy ahora espejo de otro espectro
soy lienzo que se erige vertical sobre lo frío
paralelo al enigma del alivio
transito lo azul del rito
abismo que nos mira
por donde viajan plurales mis sílabas
anómalas y desoídas
soy ahora esos estados amorfos
esas metamorfosis del cosmos
perdidas en ustedes
no ven que soy también
el último estado transparente de la carne
en el trayecto sordo de sus nombres
es que no sienten
ese rito enclítico oscuro que me enerva
y que me llega conjugado
al pretérito encendido donde habito
o es que me pretenden tal vez ahogado
en el pánico de verme gelatina plasmática
soy ahora lejos del viento
la tejedura del poema
la otra orilla de la vida en el tiempo
3
sigo perdido en la otra dimensión del polvo
sigo nada construida en esta muda sinalefa
que nos ata y nos disuelve
y nos eleva al calendario prisionero de la asfixia sin huellas
dejándonos tendidos
en el preludio cóncavo del destino
ahora soy estrés y sueños
donde hemos olvidado mi cuerpo
soy ahora un tal vez acelerado
aislado por el mito de la carne
un quizás desconocido en tu agenda sin sustancia
simulado en la hechura de tus dudas
despierto hirviente en otro estado
en otro rito
en otro cubículo de espasmos
en otras semejanzas poliformes
en otras bohemias
donde soy continuo verme
inclinación a cero
limítrofe encierro donde existo
con mi estado de olvido
y sus ojos de humo
4
estoy despierto diferente a todos
laberinto de carne que respiro
perígono de aliento
receptáculo marcándonos el radio
donde surjo descreado
estoy despierto en estos sueños de almanaque
que nos recogen viscosos y húmedos
plasma de residuos asonantes
que comprimen el aliento
soy los tiempos del espejo
futuro adelantado pasado
concurrencia paralítica de hombres digitales
y autómatas de carne
soy ahora la invención de la palabra
arritmia confusa de mi revés piedra
de mi revés río
de mi revés aire
donde he despertado
adjetivación de mí mismo y los nombres
5
soy el recuerdo de las huellas
el olvido gravado en la piedra
marea diluida
manera inconclusa de mi desforma
respiro ahora fronteras
ausencias
vacío inverso
donde me consumo dígito
agónico líquido
gases sólidos
donde soy el tiempo que no soy
donde respiro el tiempo que duermo
en el hongo confuso de esta estancia
singular de nosotros
orillado en el abismo frío donde alcanzo
mi complemento metamórfico de azufre.
MEMORIAL DE LO EQUIS
1
Duermo ahora en el trajín del ojo abierto
irisando la sentencia gutural del vino
duermo ahora polvo líquido procesado destiempo
porque soy poliforme
cornisa circular de las hojas
osciloscopio y avatares de carne
espejo viscoso
aformia horizontal del hongo
que alimenta mis sueños
ahora duermo agua
vapor de lagarto dibujando la ruta del péndulo
duermo torrencial de vidrio
y el día ya me es nocturno
2
oscilo diluido
duermo la baba de los hombres
virus bestial creciendo abismo del sexo
oscilo tumultuoso la cáscara boreal del día
habito la inexistencia gramatical del verbo
la creación apócrifa que se arrastra negada
a la flor grisácea del alba
ahí habito
en el ojo vegetal del lagarto
dónde se esconde la mirada del tiempo
dónde has olvidado los residuos del hombre
qué otros horizontes abarcan tus párpados
oscilo crepúsculos dormidos
cosmos interinos
perdidos en la arritmia de la noche
donde la elipsis inicial del azufre
le traza la ruta al fuego
3
olvido semicurvo de mi sueño consumido
he bebido la crisálida líquida
la baba aural del oxígeno
ojo abierto a la noche resbalada del sueño
oscilo vuelta inversa al oráculo
y me viene la risa
y convivo semicírculo al péndulo
quién ha partido el grito vigilante
quién se acuesta en el brillo de la boca
quién ha trazado al reloj su destino trayecto
ahora oscilo la cal en la rosa abundante
el silencio agrietado de la nada
el borde bestial del ojo que abisma la carne
donde pierdo la forma de los nombres.
GÉNESIS DEL RÍO
1
El sueño tiene el sexo del espacio
tiene los nombres residuales del polvo
vacíos de sílabas abiertas al trapecio
tiene el número del tiempo
mi sueño tiene los rostros húmedos
que deambulan el agua
donde me descubro efímero
ahogado de olvidos hueco de sus ojos
es ausencia la risa en las tardes de mi boca
es ánfora este dormir aliento
es dualidad atrapada
en disquéticos hombres
este sueño verde de fuego
2
abro el cosmos despierto
juego a soñar todos los sueños
asombro espejo el ojo
me veo vegetal cóncavo
caín fabricando obeliscos al azufre
en el silencio
tránsito a la espuma corporal del soplo
el sueño tiene lengua y sexo
tiene boca y cadencial deseo de sol
rito espiral del espejo abominando la luz
3
sudo la bestia en mi carne
vértice en la génesis del río
ahogando silencios de musgos
bajo el oscuro giro de lo equis
aún no acaba este sueño bestial
de piernas abiertas al agua
aún nos sudan sus huesos
escarabajo donde me escondo
torrente óseo circulando
los aeroductos híbridos del sexo.
PIRÁMIDES DE SUEÑO
1
Soy cosmos multiforme
ojo en el vidrio
rombo en la carne arrítmica
día nocturno
bestia herbácea
que respira la piedra
soy el esperma ausente de sus lenguas
perífrasis cerrada
en la dermis de la nada
quién susurró mi nombre al tiempo
quién dio la luz al abismo
dónde orbita el deseo la ida
pirámides de sueños
quién desteje los laberintos al ojo
a orillas del grito
qué materia ahora aprisiona mi cuerpo
quién posee el elixir para el éxodo
se ha marchado la abeja a la memoria
la rosa se abre al pétalo la vida
la mano se abre al oscuro silente
y la esencia dibuja las aristas y los vértices
al ciclo del origen
2
soy en círculo la duda
especulación de sus ojos
hongo filtrado del espejo
galaxia gelatina que abreva el espacio
en la breve órbita que sueño
quién anda tras la estadía de la sombra
siento tus labios robarme la mirada
quién inventa la existencia
siento la luz negada al encuentro con el giro oscuro
en la arena pantanosa de la carne
3
veo mis cuerpos sumergidos
oscilantes en la baba linfática de tu pecho
despierto sueño
siento el hueco de los ojos
con el vidrio ambivalente
del cosmos desleído
qué idioma inventan nuestros cuerpos
qué fonemas articula el grito del fuego
con qué señales se rasgará el deseo
he soñado que respiro el aura de tu pubis
como nuevo sistema idiomático
en un equis de silencio
he soñado la calle tumultuosa de lagartos
que nos unen y desunen los cuerpos
he soñado con el río
filtrándonos el último polvo de los huesos
y he soñado que fuimos el viaje repetido del viento
ahora sé despierto
que somos ocaso en la epifanía de la bestia
habitantes poliédricos de la carne.
LUZ ABSURDA
1
He dejado la luz
tras las hojas azules de mi limbo
cabalgando pesadillas en lo líquido de lo absurdo
saboreo la incertidumbre sólida de los barrios
bebo la ceniza del ocaso
duermo haz de sombra
donde encuentro el inverso del tiempo
retorno infinito hacia el vacío
tu cuerpo
dónde la bestia edificó este asombro
ahora que despierto en la otra carne de sus rostros
2
he perdido el estado de mi cuerpo
tu sexo
soy amorfo
soy aún la imagen pensada del invento
el soplo sin aire en el barro linfático de sus manos
quizás esos laberintos de borges
quizás esos deseos existentes del agua
de ser en el hombre
quizás ahora ni soy siquiera
porque he perdido tu invención de fuego
3
he dejado a la boca el pensamiento
dónde hicieron terrenal al hombre
quizás en el llanto colectivo del silencio
o tal vez en la baba del recuerdo
tus ojos
he vuelto al hongo del polvo
destejiendo sal a la noche
he caído del péndulo a tu pecho
oscilando mi boca en todos tus puntos
mientras nos ahoga la tibieza líquida de los cuerpos
oscila este sueño crepúsculo
este llanto antiguo
y dime qué boreal deseo
persigue la nada mineral de mi carne
soy líquido vegetal hacia la piedra
soy el equis sumergido
en el silencio tropical de tus piernas
descubiertas femeninas en mis manos
descubiertas cosmos abierto al abismo
salido de los ojos que tuvo la mañana
4
he dejado tu cuerpo en el espejo
y el mío en el círculo azul de la noche
tus senos
despierto líquido anestésico en fuego
oxígeno vítreo que respiras repetida
porque eres ese borde interino
ese cubículo geométrico de azúcar
que me hace la oscilación real del sueño
eres el espejo del péndulo que duermo despierto
equis complemento de los barrios donde florece la carne
encontrándonos recuerdo.
CÍRCULOS HÍBRIDOS
1
Bajo la vértebra híbrida de los círculos fluyo plasma
retorno al sueño linfático de la carne
donde el tiempo nos hizo báculo de polvo
inclina el epicentro púrpura al sol prístino
habita el calcio primero
la hoja unigénita del rito que gelatina mis huesos
quién me ordena oscile este cuerpo
aura abismal del péndulo
quién orilla los silencios
en este crepúsculo tardino
vértice pervivo
destilo puntos sin espacios
consume el agua mi polvo
y me hace líquido susurro su cuerpo
espejo vacío de oxígeno
donde clono la lluvia de sus ojos
creación es tu habla femenina
es ósea la huella que habitas
acertijos los nombres que nos nombran
es tránsito a la especie la memoria del grito
carne aliento la tierra que me hizo
espesa muchedumbre que duerme
el fardo agónico de la risa
he vuelto al estado gélido del cosmos
asombro espectral donde ando frívolo
construido sueño movido
en la espera resurrecta del lodo
2
asciendo al estado del agua y me desorbito los ojos
de qué azul salieron mineral mis huesos
qué aeroducto cultiva el sueño líquido de la noche
dónde mi cuerpo circula la nada cóncava
creación es lúdica tu especie
sol presente en el río
tengo el último respiro del giro
el estado del azufre
la enésima agonía del ojo
la incongruente carne del hombre
tengo el eslabón híbrido de los círculos
ida repetida sin mí por los huecos del esquizo
bajo la vértebra del espejo
tengo húmedo el silencio
carne ebria tejida al líquido
rodando la inercia tríptica de los cuerpos
equinoccio donde despierto duermo
porque recobré la aformia del barro
en la oscilación laberíntica del sueño.
BERNARDO SILFA BOR
Nació en Azua de Compostela o Compostela de Azua -Ciudad del Vía y Sur de policromía caribeña- un 11 de Junio de 1967. Su carrera literaria se inicia con el ingreso al Círculo Estudios Literarios de Azua –CIELA- en el año de 1988. En la actualidad, además, es miembro del Taller Literario Juan Sánchez Lamouth; de la Sociedad Cultural y Literaria Athene de Azua; del Taller Literario de Azua –TALIA-; del Movimiento Internacional de la Metapoesía y de la Asociación de Poetas y Escritores del Casino de Murcia en España.
Entre los premios y reconocimientos que se le han otorgado cabe mencionar los siguientes: 1989 Mención de Honor en Poesía CIELA; 1990 Primer Premio Cuento Athene; 1990 Dos Menciones de Honor en poesía Athene; 1991 Mención de Honor en poesía Athene; 1991 Segundo Premio de Poesía Athene; 1992 Segundo Premio de Poesía Athene; 1993 Mención de Honor Cuento Athene; 1993 Segundo Premio de Poesía Athene; 1993 Primer Premio de Poesía Atnene; 1995 Premio Nacional de Poesía Athene; y recientemente, en el año 2004, le fue obtorgano el premio Internacional de Poesía de Casa de Teatro como accésit por su libro Máscara de la Imago.
Por su labor educativa y sociocultural ha sido reconocido por diversas instituciones como son: 1985 Fundación Pro-juventud Padre Eduardo Mac Carty; 1991 El Club Juan Pablo Duarte; 1991 Comité Fiestas Patrióticas 19 de Marzo de Azua; 1992 Compañía Anónima Tabacalera como Poeta Local; 1997El Colegio Calasanz como Profesor del Año; 2003 La Secretaria de Educación y su Distrito Escolar 0015; 2003 La Editorial Norma y su Departamento de Literatura; 2004 La Sociedad Cultural y Literaria Athene de Azua; y también, en el 2004 Los Premios Compostela de Azua.
Textos suyos han sido antologados por Tomás Alberto Oviedo y Canó en su Antología de Poetas de Azua y por la Secretaria de Estado de Educación en la Antología Cuentos Premiados del Sur. También los escritores e investigadores Miguel Collado y Cándido Gerón lo registran en sus respectivos diccionarios de autores dominicanos.
Silfa Bor ha participado en diversos cónclaves, congresos, tertulias y recitales en el país, así como en Cuba, Puerto Rico, Estados Unidos y España donde reside desde finales del 2004. Textos suyos se han publicado en la prensa nacional e internacional y en revistas electrónicas, siendo valorados y bien acogidos por escritores, poetas y críticos tanto del país como del extranjero.
Sus libros publicados son Hacia la otra senda de la luz y Máscara de la Imago
Roosevelt Méndez
Biografía Roosevelt Alberto Méndez García Pintor, escultor y artesano, nacio en Santo Domingo, República Dominicana el día 16 de abril del qño 1958, miembro del Colegio Dominicano de Artistas Plásticos (CODAP), y Miembro desde su fundación del Grupo de Pintores y Escultores “Abelardo Rodríguez Urdaneta” de Azua, además miembro del grupo artístico –artesanal “ Santos de Palo de Bonao”, agrónomo de profesión , artista por vocación. |
GALARDONES
1994 Mención de Honor Concurso de la Secretaria de Agricultura, Sto. Dgo.
1996 Mención de Honor en el concurso de la Junta Agro empresarial Dominicana (JAD), Sto.Dgo.
2007 Mención de Honor en Concurso de Talla de la Virgen de Guadalupe, Fundación Fonalledas, Ponce Puerto Rico.
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